En todas partes vemos y oímos recomendaciones sobre beber agua y su importancia para nuestro organismo. ¡Es tan importante como respirar, añadiría yo! El consumo de agua siempre es una fuente muy importante de hidratación y salud. Cada persona es un mundo y la cantidad de agua que cada cuál debe beber diariamente depende de su metabolismo y de qué le pide el cuerpo (¡recordad escucharlo siempre!). Hagamos lista de algunos de los muchos beneficios que nos aporta el consumo regular de agua en nuestra dieta:
- Por su contenido. ¡Cero calorías, sin azúcares uy totalmente saludable!
- Para el humor. La hidratación ayuda a concentrarse y a tener la cabeza más clara, a mejorar el estado de ánimo, a rendir más en el día a día...
- Para las articulaciones. Los cartílagos, que son fundamentales para el buen funcionamiento de las articulaciones, son un 80% de agua. Beber agua los mantiene en forma y lubrica las articulaciones para que todo siga funcionando bien.
- Para la saliva. La saliva y las mucosidades internas (en la nariz, en la boca, en los ojos) previenen fricción, irritaciones y daño. Para que el cuerpo tenga recursos para generarlas, beber agua es la mejor opción. Además, beber agua en lugar de bebidas azucaradas ayuda a tener mejor salud dental.
- Para la piel. La hidratación es fundamental para mantener la salud y belleza de la piel. ¿Y cuál es la bebida que aporta más hidratación? ¡El agua!
- Para el sistema nervioso. El agua colabora en la producción de hormonas y neurotransmisores. Si tenemos la cabeza más clara y lúcida, ¡su conexión con el cuerpo también mejora!
- Para la temperatura corporal. El sudor, que nos ayuda a regular la temperatura corporal, ¡es básicamente agua! Beber y tener agua almacenada en nuestro cuerpo nos permite que esta función marche perfectamente.
- Para la presión arterial. La sangre se vuelve espesa por la falta de hidratación, y ello aumenta la presión arterial. Podemos regular ese hecho bebiendo agua con frecuencia.
- Para el sistema respiratorio. Cuando al cuerpo le falta hidratación, se contraen más las vías respiratorias para ahorrar agua, y ello puede complicar la respiración y cualquier dolencia relacionada (asma, alergias).
- Para los minerales. Los minerales se disuelven fácilmente en agua, y de esa forma llegan mucho más fácilmente a nuestros órganos.
- Para los riñones. Los riñones necesitan agua para filtrar mejor los componentes líquidos que les llegan. La falta de ella puede conllevar problemas como las piedras.
- Para el ejercicio físico. Beber agua durante el ejercicio físico es muy importante para mantener la actividad (y, como hemos dicho antes, para regular la temperatura a través del sudor).
- Para eliminar residuos. El agua es necesaria en la eliminación de residuos a través del sudor, orina y defecaciones. ¡Cuanta más bebamos, mejor!
- Para “perder” peso. Este punto es más relativo, pero si consumimos habitualmente bebidas azucaradas, cafés, alcohol, zumos envasados y otras bebidas perjudiciales para nuestro organismo, sustituirlas por agua o infusiones ayudará a no ganar peso con las otras bebidas.
Todavía un último apunte: aunque la mayoría de bebidas lleven agua en su composición (refrescos, cafés, bebidas vegetales), la cantidad de agua es poca y los beneficios que aporta, por tanto, son pocos. Siempre es mucho mejor beber agua sola, o, como mucho, en infusión. Combinarla con algún zumo natural y leche vegetal, sin azúcares, puede ser una buena base para cubrir la necesidad de líquidos de vuestro cuerpo.